El ojo de gato se vincula con el chacra número 6, utilizada en meditaciones y sesiones de relajación profunda, favorece la confianza personal, la serenidad y paz interior, y potencia la intuición.
Es una piedra que destaca por la aportación de equilibrio mental y espiritual ya que aleja las energías negativas, enfermedades y malas influencias, llevándonos a un estado de relajación, paz, tranquilidad y autocontrol.
Si conservamos nuestro ojo de gato cerca gozaremos de la fortaleza de espíritu que ofrece, propiedad adquirida gracias a su gran dureza, que representa un 8,5 de 10.
El ojo de gato es una piedra que en muchas culturas se regala a niños o a gente de negocios por dos motivos:
Se regala a niños porque en algunas culturas se cree que esta piedra es capaz de prevenir de accidentes, y que potencia la concentración y el éxito en la vida.
Por esta última razón también se regala a gente de negocios, para atraer la suerte y el éxito a sus empresas y proyectos laborales.